(Cundinamarca, 18 de septiembre de 2018). Este fin de semana la lluvia hizo una tregua para que los habitantes de Chía y las poblaciones circunvecinas pudieran concentrarse en el parque Santander, justo frente a la iglesia de Santa Lucía, y disfrutar del Festival ‘A vuelo de cóndor’, que cada fin de semana recorrió Cundinamarca, exaltando lo mejor de su cultura, paisajes, tradiciones, potencial turístico y gastronomía.
Esta versión número 11 constituyó el último sobrevuelo por el territorio cundinamarqués sobre las alas del majestuoso Cóndor de los Andes, que contó con la presencia del Comandante General de las Fuerzas Militares de Colombia, General Alberto José Mejía; el director de Publicaciones Semana, Alejandro Santos; y el alcalde municipal, Leonardo Donoso, todos aliados estratégicos en esta iniciativa.
"Ha sido un viaje maravilloso por los municipios de Cundinamarca. Ya estamos finalizando este vuelo que nos ha llenado de felicidad y de orgullo de ser colombianos. Estamos hoy aquí porque queremos construir una nueva Colombia, dándoles protagonismo a los territorios, al valor de la familia, a nuestra historia. Reconocer el pasado para mirar al futuro. Este festival es una muestra de esta Colombia que mira hacia adelante, del nuevo país que quiere pasar la página”, señaló Alejandro Santos en la ceremonia de cierre.
Rescatar el pasado, celebrar el presente y proyectar el futuro fueron razones suficientes para que propios y visitantes recorrieran palmo a palmo los stand, disfrutando de las artesanías, la variedad gastronómica, las atracciones infantiles, la música y el cine.
A ritmo de salsa y merengue, interpretados por la orquesta La Nota 13 del Ejército Nacional de Colombia, los visitantes se fueron sumando a la fiesta que muestra al departamento como nunca antes se había visto.
Saborarte Postres Artesanales y Molino Dorado son sólo dos ejemplos de las iniciativas de los habitantes emprendedores que, además de hacer empresa, se proponen rescatar las tradiciones de la región.
“Buscamos recuperar los sabores ancestrales con la fabricación de postres artesanales de manera tradicional y al mismo tiempo innovar con la transformación de algunos productos. Nuestro secreto radica en seleccionar muy bien los insumos y trabajar de forma manual y con mucho amor el postre de natas, la torta de chocolate, la milhoja argentina y la torta de almojábana, entre otras delicias, para que todo sepa diferente”, manifestó Laura Venegas, propietaria de Saborarte.
Por su parte, Héctor Elías Cifuentes, del Molino Dorado, maneja la línea de las achiras y los cabuyos; el pan artesanal de semillas, frutos rojos y arándanos; el pan sin gluten; las arepas de maíz pelado y los brownies de cacao, entre otros productos, y los distribuye en su local de la vereda Bojacá, sector El Pozo, de Chía.
Esta fue la última versión del festival ‘A vuelo de Cóndor, que comenzó en Guatavita el 30 de junio pasado y que, semana tras semana, recorrió las plazas principales de Facatativá, Ubaté, Zipaquirá, Villeta, La Mesa, Girardot, Fusagasugá, Cáqueza y Pacho.
